El agente de policía disparó contra un delincuente que lo abordó en su auto en el barrio de Caballito, actuando en defensa propia y generando debate sobre el uso de la fuerza en situaciones críticas.
Un nuevo incidente de inseguridad con un desenlace fatal tuvo lugar recientemente en el barrio porteño de Caballito. Un agente de la Policía de la Ciudad mató a un ladrón que intentó asaltarlo mientras estaba detenido en un semáforo. Según informaron fuentes, el delincuente murió en el acto.
El hecho ocurrió en la intersección de las calles Directorio y Riglos. Un inspector del Instituto Superior de Seguridad Pública de la CABA estaba en su vehículo esperando el cambio de semáforo cuando un sospechoso descendió de una moto y abrió la puerta del acompañante con intención de robar. El agente, fuera de servicio, se identificó y ordenó al ladrón que se detuviera.
En circunstancias que la Justicia aún investiga, el inspector sacó su arma reglamentaria y disparó, impactando al ladrón en la cabeza, lo que causó su muerte instantánea.
Las autoridades judiciales, a cargo del Juzgado Criminal y Correccional Nº 14, dirigido por el Dr. Raboni, investigan el suceso. Se solicitó la intervención de la Policía Federal Argentina y se verificó que el ladrón fallecido tenía un extenso historial delictivo con casi 30 causas por robo, tentativa de robo, daños y hurto entre 2022 y 2023.
Un hecho similar ocurrió hace una semana en Morón, donde otro agente porteño mató a un motochorro que intentó robar a una pareja en una parada de colectivo. En ese incidente, un segundo delincuente fue herido y hospitalizado.
El agente, que esperaba a su novia en la esquina, se identificó y dio la voz de alto, pero los delincuentes abrieron fuego, obligando al policía a defenderse. Uno de los ladrones murió por un disparo en la cadera, mientras que el otro fue operado por heridas en la pierna y el tórax.